LAS CUATROS LEYES ESPIRITUALES
¿Has oído las cuatro leyes espirituales? "Así como hay leyes naturales que rigen el universo, también El amor de Dios El plan de Dios ¿Por qué es que la mayoría de las personas no están experimentando esta "vida en abundancia"?Porque... SEGUNDA LEY El hombre es pecador El hombre fue creado para tener compañerismo con Dios, pero debido a su voluntad terca y egoísta, escogió su propio camino y su relación con Dios se interrumpió. Esta voluntad egoísta caracterizada por una actitud de rebelión activa o indiferencia pasiva, es evidencia de lo que la Biblia llama pecado. El hombre está separado Este diagrama ilustra que Dios es santo y que el hombre es pecador. Un gran abismo lo separa. Las flechas señalan que el hombre está tratando continuamente de alcanzar a Dios para establecer una relación personal con El a través de sus propios esfuerzos, tales como vivir una buena vida, filosofía o religión---pero siempre falla en su intento. La tercera ley explica la única manera de atravesar este abismo. . . TERCERA LEY El murió en nuestro lugar El resucitó de entre los muertos Es el único camino a Dios No es suficiente tan solo conocer estas tres leyes... CUARTA LEY Debemos recibir a Cristo Recibimos a Cristo mediante la fe Cuando recibimos a Cristo experimentamos un nuevo nacimiento(Lee San Juan 3:1-8) Recibimos a Cristo por medio de una invitación personal: El recibir a Cristo significa volverse a Dios, abandonando nuestra vida egocéntrica (arrepentimiento), confiando en Cristo para que venga a nuestra vida y nos perdone nuestros pecados. De esa manera podrá hacernos la clase de personas que El quiere que seamos. No es suficiente el solo estar de acuerdo intelectualmente que Jesucristo es el Hijo de Dios y que murió en la cruz por nuestros pecados. Ni es suficiente el tener una experiencia emocional. Se recibe a Cristo por fe, como un acto de nuestra voluntad. A continuación te explicamos cómo puedes recibir a Cristo. TU PUEDES RECIBIR A CRISTO AHORA MISMOMEDIANTE ESTA ORACIÓN Dios conoce tu corazón y no tiene tanto interés en tus palabras, sino más bien en la actitud de tu corazón. La siguiente oración se sugiere como guía. ¿Expresa esta oración el deseo de tu corazón? Si lo expresa, haz esta oración ahora mismo, y Cristo entrará a tu vida tal como El lo prometió. Como sabes que Cristo está en tu vida: La Biblia promete vida eterna a todos los que reciben a Cristo Agrádesele siempre porque Cristo está en tu vida y nunca te abandonará (Hebreos 13:5). Tu puedes estar seguro, en base de Sus promesas, que Cristo vive en ti y de que tienes vida eterna desde el momento en que lo invitaste a entrar en tu vida. El no te engañará
hay leyes espirituales que rigen nuestra relación con Dios."
Dios te AMA, y tiene un PLAN maravilloso para tu vida.
"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna." (San Juan 3:16)
Cristo dice: "Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia" (Una vida completa y con propósito). (San Juan 10:10b)
El hombre es PECADOR y está SEPARADO de Dios, por lo tanto no puede conocer ni experimentar el amor y el plan de Dios para su vida.
"Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios." (Romanos 3:23)
"Porque la paga del pecado es muerte..." [o sea separación espiritual de Dios.] (Romanos 6:23)
Jesucristo es la ÚNICA provisión de Dios para el pecado del hombre. Sólo a través de El puedes conocer a Dios personalmente y experimentar el amor y plan de Dios para tu vida.
"Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8).
"Cristo murió por nuestros pecados... fue sepultado, y... resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;... apareció a Pedro, y después a los doce. Después apareció a más de quinientos..." (I Corintios 15:3-6).
"Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por Mí" (San Juan 14:6).
Debemos individualmente RECIBIR a Jesucristo como Salvador y Señor; sólo así podremos experimentar el amor y el plan de Dios para nuestras vidas.
"Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios." (San Juan 1:12)
"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe." (Efesios 2:8-9)
(Cristo dice) "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él..." (Apocalipsis 3:20).
(Orar es hablar con Dios)
Señor Jesús, te necesito. Gracias por morir en la cruz por mis pecados. Te abro la puerta de mi vida y te recibo como mi Salvador y Señor. Gracias por perdonar mis pecados y por darme vida eterna. Toma control del trono de mi vida. Hazme la persona que Tú quieres que yo sea. Amén.
¿Recibiste a Cristo en tu vida? De acuerdo con Su promesa en Apocalipsis 3:20, ¿Dónde está Cristo ahora mismo en relación a tu vida? Cristo dijo que entrará en tu vida. ¿Te engañaría El? ¿En qué base a que autoridad sabes que Dios te ha contestado tu oración? (Por la fidelidad de Dios mismo y Su Palabra.)
"Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en Su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna". (I Juan 5:11-13).
Un importante recordatorio. . . No dependas de sus sentimientos La promesa de la Palabra de Dios, la Biblia, y no nuestros sentimientos es nuestra autoridad. El cristiano vive por fe (confianza) en la fidelidad de Dios mismo y Su Palabra. Ahora que has recibido a Cristo En el momento en que tu, en un acto de fe, recibiste a Cristo, mediante un acto de tu voluntad, muchas cosas ocurrieron, incluyendo las siguientes: 1. Cristo entró en tu vida (Apocalipsis 3:20 y Colosenses 1:27). 2. Tus pecados te fueron perdonados (Colosenses 1:14). 3. Tu has llegado a ser Hijo de Dios (San Juan 1:12). 4. Comenzaste a vivir la gran aventura para la cual Dios te creó (San Juan 10:10, 2 Corintios 5:17 y I Tesalonicenses 5:18). ¿Puedes pensar en algo más extraordinario que te haya ocurrido que el entrar en una relación personal con Cristo? ¿Te gustaría dar gracias a Dios en oración ahora mismo por lo que El ha hecho por ti? Al dar gracias a Dios, tu estás demostrando fe. Para disfrutar tu nueva vida al máximo. . . Sugerencias para el crecimiento Cristiano El crecimiento espiritual es el resultado de confiar en Cristo Jesús. "El justo por la fe vivirá" (Gálatas 3:11). Una vida de fe te capacitará para confiar en Dios cada vez más en todo detalle de tu vida y para practicar lo siguiente: C Conversa con Dios en oración diariamente (San Juan 15:7). R Recurre a la Biblia diariamente (Hechos 17:11). I Insiste en confiar en Dios cada aspecto de tu vida (I Pedro 5:7). S Se lleno del Espíritu Santo --- permítele dirigir y fortalecer tu vida diariamente para testificar T Testifica a otros de Cristo verbalmente y con tu vida (San Mateo 4:19, San Juan 15:8). O Obedece a Dios momento a momento (San Juan 14:21). El compañerismo en una buena iglesia La palabra de Dios amonesta "no dejando de reunirnos" (Hebreos 10:25). Las brasas de un fuego arden cuando están juntas, pero si tu apartas una, esta se apagará. Así es tu relación con otros cristianos. Si tu no eres miembro de una iglesia, no esperes a que te inviten a hacerlo. Toma la iniciativa; llama o visita a un ministro de Dios en alguna iglesia cercana donde se exalte a Cristo y se predique Su Palabra. Comienza esta semana, y haz planes de asistir regularmente. ¿Deseas compartir tu descubrimiento? Si este folleto ha tenido significado para ti o te ha ayudado a conocer a Cristo personalmente, por favor avísale a tus familiares y amigos sobre el o léelo a otra persona. Las Cuatro Leyes Espirituales escrito por Dr. Bill Bright. © 1965,1995 de Cruzada Estudiantil para Cristo. Publicado con permiso.
El diagrama del tren ilustra la relación entre el hecho (Dios y Su Palabra), la fe (nuestra confianza en Dios y en Su Palabra) y los sentimientos (el resultado de la fe y la obediencia) (San. Juan 14:21).
El tren corre con o sin el vagón. Sin embargo, sería inútil tratar de que el vagón mueva el tren. Del mismo modo, como cristianos nosotros no dependemos de los sentimientos o emociones, sino que ponemos nuestra fe (confianza) en la fidelidad de Dios y en las promesas de Su Palabra.
Empieza con el Evangelio de San Juan.
(Gálatas 5:16-17; Hechos 1:8).